El asesino silencioso

Por Claudia K. Gutiérrez

El ser humano es aquejado por numerosas enfermedades, prevenibles, con o sin cura, pero aun así tenemos que lidiar con ellas en nuestra vida diaria. De muchas de ellas no conocemos exactamente su origen, como los canceres que son culpables de la muerte de más de 3 millones de hombres y casi tres millones de mujeres alrededor del mundo. Son cifras alarmantes, como muchas otras enfermedades. Pero, ¿Qué es lo que causa la existencia de este tipo de enfermedades? Me pregunté esto el otro día de camino al gimnasio, iba caminando y pasó un carro a mi lado y sentí al respirar todos los químicos que entraban en mi cuerpo. El aire que respiramos no esta limpio, pero para nada limpio, la biosfera, es decir, el espacio donde se desarrolla la vida, donde nosotros vivimos. Está totalmente contaminado por químicos, gases, entre muchos otros productos que para nosotros son necesarios, además de todos los desechos causados por la vida moderna de los humanos.

Todos los avances que ha habido durante la vida del ser humano han sido aplaudidos a lo largo de la historia, y sí han hecho la vida más fácil y muchos de estos productos de los que hablo, son necesarios para el desarrollo de la sociedad en la que vivimos, los humanos al final de cuentas lo único que queríamos es tener medios de transporte, productos para la vida diaria, como muebles, televisores, computadoras, espejos, etc. Nunca esperamos que esto nos fuera a terminar destruyendo, ¿no es cierto?
Como toda buena película de Woody Allen, la vida es tan irónica ¿no? Logramos desarrollarnos y desarrollar creaciones totalmente revolucionarias, que cada día nos sorprenden más y que han modificado la forma de vivir de todos nosotros. Sí, logramos todo esto, y ahora caminamos por las calles dañando nuestro cuerpo a causa de nuestras propias creaciones, como lo dije, muy irónico, es como una comedia de tinte negro, donde el personaje principal encuentra el amor y se casa y al salir de la iglesia la es arrollada por un conductor ebrio, así es la vida, al final de cuentas.

Se habla hasta del fin del mundo, el cual es totalmente real, pero no nos tocará a nosotros, ni a nuestros hijos, ni a los hijos de nuestros hijos, ni a los bisnietos de estos, es decir, faltan miles de millones de años para esto, el fin, el cual es inminente, sólo que probablemente nosotros logremos el fin de nuestra existencia antes de que esto suceda, a causa de nuestra maravillosa vida moderna. A la gente nos parece tan normal la vida que llevamos, es impresionante como estamos tan acostumbrados a nuestra vida cotidiana que no concebimos otra forma de vida, es hasta de risa para muchas personas el hecho de que puedan existir otras formas de vida, que no nos dañen de la forma en que esta vida nos esta dañando, ni si quiera se dan cuenta de que el aire que estamos respirando ya no es el aire que necesitamos para sobrevivir, sino una mezcla desconocida no sólo de oxigeno sino de una mezcla de químicos que es el verdadero asesino silencioso y que ningún avance médico podrá detener, sólo nosotros, nuestras decisiones, pero ¿lograremos hacerlo?